14/6/09

Escenas

Ojos que no ven (Ana Cacopardo y Andrés Irigoyen; 2009)




Focalización: No se anima del todo


- Este es mi tío - dijo mi compañera de trabajo- me pidió que vaya a verla.

Ramón está preso en una cárcel en Río Gallegos y es uno de los testimonios del documental Ojos que no ven, que explora las vejaciones a los presos - y sus familias- en el sistema carcelario argentino.

Fuimos 3: ella, su novio y yo. Un festival de derechos humanos, lleno de lentes de carey (como los míos, por ejemplo) y chicas con boinas y oenegeístas progres. Es simpático distanciar la mirada y ver que hay una categoría que representa la "gente como uno" en todos los campos, no? incluso este, tan políticamente correcto.

Entramos con un balde de pochoclos y una Pepsi, grandes. Disruptivo


La sangre brota (Pablo Fendrik; 2009)



Focalización: tan argentina

Segunda vez en mi vida que voy al cine sola. Gaumont, 2 cuadras, 6 pesos, 10 espectadores.
Con ese nombre, amerita la pantalla grande. La pantalla roja, la imagen oscura y ampliada. El espacio y el tiempo necesarios para mostrar cada gota, para ponerle la idea a cada frunce de una frente.

Insisto en el buen cine argentino: ¿qué harías vos en esta situación? Con esto que te cayó acá y ahora. Con esto que se vino incubando, estalló y ahora brota y se escurre por un argumento...



Bellamy (Claude Chabrol; 2009)




Focalización: elije tu propia película
- Che...no avanza

- Bueno, qué cariñosos, pero ya...

- ¿Con quién está?
- Con el inspector, el otro, porque les había comprado el auto
- ...ah...

- ¿Se murió?
- No sé.

- ...pero al final ¿era el vagabundo?
- No, era el estafador.
- ¿Cuál?
- El que se hacía pasar por vagabundo
- No, era el vagabundo el que se hacía pasar por el estafador
- ¿Segura?
- No.

Una semana solos (Celina Murga; 2009)







Focalización:
lo qué?


Cuando era chica nos juntamos una tarde en la casa de Cecilia
en Valle de Oro, nos aburrimos y en vez de cruzarnos a Defensores nos fuimos a la fábrica de la Jorge Newery. Pensamos que estaba abandonada. Rompimos unos vidrios y despelotamos unos papeles. Vino un guardia, nos escondimos pero nos encontó, nos sacudió unos retos y nos dejó ir por pendejas tontas, algo dañinas, pero en definitiva sólo traviesas.

¿Te podría tener 2 horas sentado contándote sólo esto? La pareja que se levantó y se fue a la mitad de la película me respondería que no.
No alcanza el retrato largo, lento y superficial de una clase, ni el cruce estereotipado con otra, ni los lugares comunes del proceso de maduración adolescente.

Se puede mostrar abulia sin generar abulia, excepto que la empatía sea tu finalidad. Pero yo no voy al cine a aburrirme, aunque lo produzca Martin Scorsese.



3 ¿Qué ves cuando leés?:

A. dijo...

Por qué no te grabas y lanzas tu carrera de crítica como hizo Felisa?
Acá va videito de muestra:

http://www.youtube.com/watch?v=vZcxR1GsV2A

Bso!
A.

Ana dijo...

Y yo hace taaaaaanto que no voy al cine.
Andá anotandome las que no me tengo que perder :))
Besos de "gente como uno" (jua!)

Maguitxu dijo...

versión anónima : grooooooosssssa felisaaaa!!!!!! jajajajajaja
ya la sumo a mis links!!!!

Dícese de la dimensión democratizadora de Internet.

de hecho, acá va la crítica de La Sangre Brota: http://felisacritica.blogspot.com/
y espero con ansias la de Una Semana Solos!

versión mamá : si ...si...habíamos dicho que cuando quisieran ""ir al cine"" (guiño- guiño) se quedaba con la madrina la nena eh! jajajajaajjaaj


ambas versiones ... somos gente como uno, no lo neguemos!